Las mujeres en pandemia
El 2020 promete ser vivido con la atención permanente de toda la sociedad sobre una parte de las repercusiones que ocasiona el fenómeno de la pandemia. La salud es un tema central.
El modelo estadístico sobre la cantidad de contagios y muertes diarias por la causa del virus es opinable en el lugar en el que vivimos y en todo el país. De esto se habla. Nos importa la realidad de Latinoamérica porque naturalmente es nuestro barrio en el continente y por los propios rasgos idiosincráticos con los que nos integramos. Reconociendo que las comparaciones siempre son imperfectas, resultan ineludibles entre los estados nación.
También es inevitable la observación sobre lo que sucede en Estados Unidos. A fin de cuentas, sigue siendo un centro gravitante de poder en el mundo entero. Mientras, las miradas sobre los suelos europeos por el arraigo cultural que formaron aquellas migraciones durante los dos siglos pasados en Argentina crea inquietudes informativas.
Es decir, la respiración contenida de las audiencias anda entre los urgentes y las alertas en el minuto a minuto y la derivación de ese proceder hace que un problema invada una parte considerable de la superficie de la vida cotidiana. Es el riesgo latente de la reducción que expone la pandemia que se mediatiza.
Nos encontramos ante una crisis bastante irreversible para algunos, aunque plausible de ser pensada como el comienzo de un nuevo tiempo de reparaciones de injusticias para otros.
La extensión de la enfermedad desde Asia, con su paso por Europa y llegando finalmente a América, nos demuestra que las fatalidades tienen líneas de continuidad, mientras que las crónicas de la humanidad revelan hechos marcados por la expoliación de la vida.
En esta edición, hablamos de la violencia de genero y es el tema elegido por Redacción Mayo.
No todo el resultado funesto de lo que (nos) pasa es por el Covid-19. Los afluentes de inequidades y falta de justicia social vienen de lejos, permanecen, se agudizan y allí están las mujeres siendo un colectivo social vigoroso que expresa un disenso, una crítica potente a la estructura patriarcal. Se ha logrado que no sea un costado ignorado de la sociedad porque existe una deliberación que no declina sabiendo que los cambios no son de una vez y para siempre.
Mujeres en todos los frentes de lucha por una vida libre de violencias en medio de la pandemia global. Y los femicidios a la vista, creciendo de manera exponencial. La información sobre los hechos se presenta con el espesor de dolor.
Así, en junio, damos visibilidad a las problemáticas de género, porque desde hace tiempo las mujeres y disidencias se ven afectadas por una pandemia y es responsabilidad de toda la sociedad poder erradicarla. Siempre mirando hacia los territorios, tejiendo redes que nos conecten, para superar el aislamiento, para romper el silencio.
Si sos víctima de violencia de género o conocés a alguien que necesite ayuda, comunicate con la línea nacional y gratuita 144, que funciona los 365 días del año, las 24 horas. También podés enviar un mensaje con la palabra "hola" por Whatsapp +54 9 11 2771-6463.